Una correcta higiene es fundamental para mantener la salud bucal. Este hecho es especialmente importante durante el tratamientos de ortodoncia, ya que unas encías sanas permiten un movimiento dentario más rápido y eficaz. Es imprescindible después de cada comida, el cepillado dental. Los aparatos de ortodoncia no producen caries. Lo que sí producen es la retención de alimentos entre los alambres que facilitarán la formación de placa bacteriana y así el riesgo de generar caries. La placa bacteriana es una sustancia blanca y pegajosa que se deposita en los dientes cada vez que comemos. Cuando no nos limpiamos los dientes y los alimentos se acumulan, la placa puede provocar la inflamación de las encías, manchas en los dientes, caries y mal aliento.
Cuando se inflaman las encías aparece dolor, y constantemente están sangrando. Este es el primer síntoma de que la limpieza no va bien y que justamente allí, donde sangra la encía, es el lugar donde deberemos esmerarnos en la limpieza e higiene. Una correcta higiene bucal se basa fundamentalmente en un buen cepillado y en los hábitos de alimentación que tenga el paciente.
Cepillado
3 veces al día, sobre todo antes de acostarse, durante al menos 2 minutos. Utiliza un buen cepillo, indicado por tu ortodoncista, y cámbialo con regularidad.
Existen cepillos específicos para ortodoncia. Tu ortodoncista te enseñará a utilizarlos. Consejos sobre alimentación
Evitar alimentos azucarados: La caries son producidas fundamentalmente por el azúcar. Es especialmente importante evitar la ingesta continuada de alimentos azucarados durante los tratamientos de ortodoncia. Si se toma algún alimento azucarado hay que lavarse los dientes inmediatamente.
Se deben evitar aquellos alimentos duros o pegajosos que puedan romper o deformar los aparatos, lo que podría retrasar o alterar el plan de tratamiento previsto. por ejemplo: frutos secos, caramelos, chicles, turrón duro, masticables, palomitas de maíz, aceitunas, pan tostado, etc.
Cuidados especiales al tener frenillos Procura no cortar los alimentos con los dientes (chocolate, zanahorias, manzanas). Es mejor llevarlos a la boca en pequeñas porciones.
No meterse nada dentro de la boca como objetos duros o lápices. Estos cuidados son principalmente para evitar que no se despeguen o caigan los frenillos.
No meterse los dedos ni manipular los alambres sin consultar a su ortodoncista.
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